Un pequeño pueblo en la provincia de Chubut, es considerado un secreto bien guardado en la Patagonia argentina. Rodeado de impresionantes paisajes de lagos, montañas y playas desérticas, este destino cautiva a los viajeros con su belleza y la variedad de actividades al aire libre que ofrece.
Ubicado estratégicamente en la provincia de Chubut, el pintoresco pueblo de Cholila es un destino ideal para aquellos que buscan sumergirse en la belleza natural de la Patagonia. Con su proximidad a la Cordillera de los Andes, Cholila ofrece una variedad de paisajes impresionantes que se despliegan en todo su esplendor durante el verano.
Cholila es conocido como un “secreto bien guardado” debido a sus vistas imponentes y su identidad única. Rodeado de lagos cristalinos, majestuosas montañas y playas casi desérticas, este pequeño pueblo es un paraíso para los amantes de la naturaleza y los entusiastas de los deportes al aire libre.
La diversidad cultural y la historia de Cholila también son aspectos destacados de este lugar. Desde los primeros pobladores tehuelches hasta los actuales habitantes criollos y descendientes de diferentes nacionalidades, Cholila ha sido testigo de una rica herencia cultural y de la producción ganadera que ha dado forma a su identidad única.
Para los amantes de la aventura, Cholila ofrece una amplia gama de actividades al aire libre. Los senderistas pueden disfrutar de impresionantes rutas de trekking que atraviesan valles y ofrecen vistas panorámicas desde el mirador de los 4 Valles hasta el alero del cerro Pintado. Los aficionados al andinismo pueden desafiar a los cerros La Momia y el Tres Picos para alcanzar cumbres espectaculares.
Los amantes de los deportes acuáticos también encontrarán en Cholila un lugar para disfrutar. El lago Pellegrini es ideal para la pesca deportiva y los entusiastas del kayak pueden explorar las aguas cristalinas de la región.
Además de su belleza natural y actividades al aire libre, Cholila también cuenta con eventos festivos que añaden un toque especial a la experiencia. La Fiesta Nacional del Asado, que se celebra en febrero, permite a los visitantes disfrutar de la tradicional gastronomía de la región y sumergirse en la cultura local.