En el Día de la Lealtad Peronista, se rememora el 17 de octubre de 1945, un momento histórico que marcó un antes y un después en Argentina. El entonces coronel Juan Domingo Perón, exigiendo justicia laboral, desató una movilización obrera que cambió el rumbo del país.
El 8 de octubre de 1945, Juan Perón fue destituido de sus cargos de vicepresidente, secretario de Trabajo y ministro de Guerra, una decisión que desató tensiones con la cúpula militar que se oponía a sus políticas laborales.
Fin de la “Década Infame” y un Líder Emergente
El conflicto se enraizó en el golpe de 1943, temiendo que Argentina abandonara su neutralidad y apoyara a los aliados en la Segunda Guerra Mundial. Esta era conocida como la “Década Infame”, caracterizada por la corrupción.
El Discurso que Cambió la Historia
El 10 de octubre, Perón pronunció un discurso desde el balcón de la Secretaría de Trabajo, presentando un programa laboral avanzado que resonó en la sociedad.
La Detención que Desató una Revolución
El 12 de octubre, Perón fue arrestado y llevado a la Isla Martín García. Sin embargo, su detención desencadenó una movilización sin precedentes.
El Pueblo se Hizo Oír
La madrugada del 17 de octubre, trabajadores de diversos sectores y barrios cruzaron el Riachuelo para mostrar su apoyo a Perón. Este evento destacó a los “cabecitas negras”, una expresión despectiva que luego sería abrazada por Eva Perón.
El Acuerdo que Cambió la Política
Un encuentro entre Perón y el nuevo ministro de Guerra, Ávalos, selló un acuerdo. Perón hablaría a la multitud, no mencionaría su detención, y obtendría la retirada de los manifestantes. El gabinete renunciaría y Ávalos pediría su retiro.
El Futuro: Un Líder que Marcaría Época
La noche del 17, Perón se dirigió a la multitud, agradeció su apoyo, prometió seguir luchando por los trabajadores y por la paz social. Cuatro meses después, ganaría las elecciones, dejando una huella imborrable en la historia de Argentina.