La Cámara de Diputados dio hoy media sanción al proyecto que actualiza y garantiza el financiamiento de las universidades nacionales, con 158 votos afirmativos, 75 negativos y 5 abstenciones.
Una amplia mayoría legislativa respaldó la iniciativa impulsada por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), que propone elevar el presupuesto al 1% del PBI, incluir una recomposición de fondos entre mayo y diciembre de 2024 y establecer actualizaciones bimestrales por inflación a partir de enero.
También se contempla la convocatoria a paritarias para docentes y no docentes, una suma especial para carreras estratégicas, y la compensación salarial por la pérdida frente a la inflación desde diciembre de 2023.
El proyecto incluye además que, en 2025, se incorporen al salario básico todas las sumas no remunerativas ni bonificables y que la Auditoría General de la Nación (AGN) controle el uso de los recursos y remita informes al Congreso.
La aprobación representa un golpe político para el Gobierno de Javier Milei, que rechaza la iniciativa y quedó en minoría durante el debate.
El oficialismo atraviesa una nueva tensión con los gobernadores dialoguistas, cuyo apoyo en ambas cámaras resulta clave.
El texto será girado al Senado, donde se anticipa un escenario favorable para su aprobación definitiva.
Durante el debate, la diputada Blanca Osuna (UxP) denunció que “el presupuesto educativo es el más bajo en dos décadas”, mientras que Danya Tavela (Democracia para Siempre) recordó que muchos legisladores “fueron formados en el sistema universitario público” y calificó al Gobierno como “corrupto e insensible”.
Por su parte, Mercedes Llano (LLA) defendió a la Casa Rosada, criticando la “falta de previsión financiera” del proyecto.



