El Gobierno prepara una reforma laboral que reduciría los aportes que realizan las empresas para la jubilación, el PAMI, la obra social, el Fondo Nacional de Empleo y el Seguro de Vida Obligatorio y ART.
En este caso, serían los propios empleados quienes se encarguen de esta reducción. Actualmente, cada uno de los trabajadores registrados aportan ya un 11% para la jubilación, un 3% para PAMI y otro para la obra social.
El proyecto también modificaría el tiempo de período de prueba, actualmente de 3 meses. En su momento, se habló de una ampliación a 6, 8 o hasta 12 meses.
Otro de los puntos clave de la reforma es la flexibilización de las indemnizaciones por despido. El proyecto buscaría reducir las categorías que componen la indemnización, excluir beneficios como el pago del celular, la canasta o vales alimentarios, bonos anuales, u otros que se incluyen en la remuneración.
Además, se buscaría eliminar la relación que existe entre los intereses en la indemnización y el número de la inflación, para que estos créditos laborales no se actualicen según la suba de precios, como hoy rige la Ley.
Por último, el proyecto también busca modificar el porcentaje que se le descuenta del sueldo a los trabajadores no afiliados para el sindicado, por su trabajo en la negociación paritaria con la empresa.
La reforma laboral es una de las principales medidas que el Gobierno planea anunciar en los próximos días. El proyecto, que todavía está en discusión, apunta a desregular el mercado laboral y reducir los costos para las empresas.
fuente: cronista.com