El Impuesto a las Ganancias en los últimos meses ha sido un tema central en los debates legislativos recientes. Si el Congreso mantiene el esquema vigente, a partir de la semana que viene, el alcance del impuesto se definirá según los siguientes parámetros:
El esquema actual en Ganancias establece que el mínimo no imponible es de 15 salarios mínimos vitales y móviles (SMVM), lo que equivale a un salario bruto mensual de aproximadamente $3.514.725. Este monto puede variar con las actualizaciones del salario mínimo.
En las distintas categorías de contribuyentes: aquellos empleados solteros con un salario bruto de hasta $1.800.000 (equivalente a un salario neto de $1.494.000) estarán exentos del impuesto, si sigue el esquema vigente.
En tanto, un empleado soltero con dos hijos menores a cargo estará exento si su salario bruto es inferior a $2.100.000 (salario neto de $1.781.277,39). A su vez, un empleado casado con dos hijos menores a cargo estará exento si su salario bruto es inferior a $2.400.000 (salario neto de $2.081.277,39).
La actualización del mínimo no imponible se realizará de forma trimestral durante este año y luego de forma semestral, basada en el Índice de Precios al Consumidor (IPC). Se estima que alrededor de 800.000 personas se verán afectadas por esta normativa si se mantiene el esquema vigente.
Esto incluye a aquellos que superen el mínimo no imponible y, por lo tanto, deberán tributar según las alícuotas establecidas, que van del 27% al 35% dependiendo del nivel de ingresos.
Cuentas claras
El Senado rechazó recientemente una propuesta del Ejecutivo que buscaba revertir los cambios realizados por el gobierno anterior. Ahora, la Cámara de Diputados deberá decidir si acepta la decisión del Senado o insiste con el texto original que contemplaba una reforma más amplia.
Si el Congreso mantiene el esquema vigente, el Impuesto a las Ganancias afectará principalmente a aquellos con salarios brutos superiores a $1.800.000, con exenciones específicas para empleados con cargas familiares. La actualización del mínimo no imponible y las alícuotas aplicables serán factores clave en la determinación del impacto fiscal para los contribuyentes.
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